Los romanos contaban, o más bien ordenaban (cosa muy romana lo del ordeno y mando) con unos números en base decimal. Su expresión escrita era muy parecida a contar con los dedos:
I II III IV (hay también uso de la forma IIII) V VI VII VIII IX X
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| Elaboración propia a partir de Reddit (ver abajo) | 
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| Fuente: Reddit (creo que queda mejor si se empieza a contar el I con el meñique, el II con meñique y anular, el III con meñique, anular y corazón, el IV como el VI de este dibujo, el V como el II de este dibujo, el VI como el III de este dibujo y el VII como el IIII de este dibujo. Lo demás me gusta. | 
Aunque lo habitual es considerar que contar con los dedos (de las manos o de los pies) es el origen de la base decimal, imaginemos otra posibilidad: la de la famosa unidad militar romana llamada DECURIA.
Hay pájaros que cuentan sus huevos, de modo que hay un "sentido numérico" que permita apreciar las cantidades (al menos distinguir entre "uno", "dos", "tres" y "muchos") con el sentido de la vista. Por muy pocas luces que tuviera un humano, incluso los romanos, por muy Brutus que fueran, un DECURIÓN (el jefe de la unidad), tenía muy fácil saber de un solo golpe de vista si todos sus subordinados habían formado correctamente en un cuadrado de 3 x 3.
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| ¡Estáis todos! Si estoy yo detrás (que ya han dicho que tonto no soy), diez somos. | 
Lo que hemos contado aquí si non e vero e ben trovato, pero es fantasiosa. La información más verificable la ponemos a continuación.
ORGANIZACIÓN DEL EJÉRCITO ROMANO
La denominación DECURIA comenzó siendo una agrupación civil de diez ciudadanos en la primitiva ciudad de Roma. Diez decurias formaban una CURIA y diez curias una GENS. Habría cien GENTES, lo que supondría diez mil ciudadanos. La organización militar respondía a esa organización política, aunque de manera diferente, puesto que según su riqueza y rango social los romanos eran del orden senatorial (las familias patricias, muy ricas -millones de sestercios- que ocuparían los más altos cargos en el ejército), del orden ecuestre (-debían disponer de más de cuatrocientos mil sestercios en propiedades- se podían permitir el equipamiento de un caballo de guerra) o de la plebe (que servían como soldados de a pie si se podían equipar con armas). Los proletarios no entraban en el ejército porque no disponían de recursos para armarse a sí mismos (contribuían al Roma solo con su "prole"). En las provincias había un "orden decurional" al que pertenecían los más ricos, que gobernaban cada municipio romano. En el siglo I d. C. un trabajador asalariado podía cobrar mil sestercios al año, pero un alquiler en Roma costaba el doble. "El precio estándar de un esclavo oscilaba entonces [en época de Augusto, finales del siglo I a. C.] entre los 800 y 2.000 sestercios... El clasicista Jerry Toner calculó que la alimentación básica de una familia corriente de cuatro miembros podía costar unos 1.000 sestercios al año. ... un legionario en aquella época cobraba 900 sestercios al año, un trabajo manual oscilaba entre los 700 y 1.500 sestercios; y los profesionales cualificados como abogados, arquitectos o médicos podían ganar mucho más." (Historia National Geographic)
Con el paso del tiempo, las reformas militares significaron el alejamiento de estas denominaciones de su primitivo significado. La legión romana de época tardo-republicana e imperial se organizaba de forma distinta a las sucesivas agrupaciones de la época de la monarquía (una LEGIÓN) y de comienzos de la república (dos legiones, cada una al mando de un CÓNSUL), tomando una forma más definitiva con la reforma de Cayo Mario hacia el año 100 a. C., que también fue cuando los legionarios pasaron a recibir una "soldada" fija -"salario" o "estipendio"-, pues hasta entonces dependían del reparto del botín obtenido ("450 sestercios al año, cantidad que fue doblada por Julio César. Esos 900 se repartían en tres pagos al año de 300 de cada uno. Más tarde, con Domiciano, subió cada pago a 400, haciendo un total de 1200 sestercios al año. Caracalla, en torno al año 211 d.C, la incrementó considerablemente" -[ver fuente]-).
La agrupación de soldados que mandaba un DECURIÓN no se denominaba "decuria" sino CONTUBERNIO, y estaba compuesta por los ocho hombres que dormían en la misma "taberna", que es el nombre que daban a la tienda de campaña (solo seis a la vez, porque siempre había dos que hacían guardia en el exterior). La agrupación de diez contubernios era una CENTURIA (total 80 hombres), dirigida por un CENTURIÓN. Los MANÍPULOS agrupaban a dos centurias de ochenta hombres (total 160 hombres). Las COHORTES agrupaban tres manípulos de 160 cada uno (total 480 hombres) y eran mandadas por un TRIBUNO (que podían mandar hasta dos cohortes, pues en cada legión había uno de orden senatorial -"tribuno laticlavio"- y cinco de orden ecuestre -"tribunos angusticlavios"-). Una LEGIÓN agrupaba diez cohortes de 480 hombres (total 4800 hombres) y era mandada por un LEGADO.
El número total de hombres en realidad sería mayor por las ALAS de caballería (ala quingenaria, de unos 500 hombres cada una, mandados por un PREFECTO -cada ala estaba compuesta de varias TURMAS de unos 30 hombres cada una, mandadas por un DECURIO-) y la presencia de AUXILIA (tropas de pueblos aliados con los romanos -"socii"-, que no se organizaban del mismo modo).
Los máximos rangos a los que podía ascender un legionario veterano que demostrara gran capacidad eran el de Primus pilus (que custodiaba el águila de la legión y daba órdenes a todos los demás centuriones) y el de Praefectus castrorum (cargo al que accedía si después de un año como Primus pilus no se licenciaba, entrando en el orden ecuestre).
Pudieron llegar a movilizarse 50 legiones. En tiempos de Julio César se numeraron treinta, que se fueron alterando con distintos sobrenombres durante el Alto Imperio. En el Bajo Imperio se numeraban doce legiones que en realidad se multiplicaban con distintos sobrenombres.
CONTAR CON LOS DEDOS
Está claro que contar con los dedos puede ser mucho más complicado, y así se hacía.
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| Fuente: Imperium Romanum | 
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| Fuente: Historias de la Historia | 
 
 
 
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